jueves, 2 de septiembre de 2010

EL SÍNDROME DEL CAPITALISMO

  
   La obsesión por mantenerse en el error, los capitalistas, durante tantos siglos; cuyo error consiste en que, el sistema capitalista aberrante que impera en occidente y muy pronto, si no se curan, llegará a estar globalizado; ha perjudicado y está perjudicando a la Humanidad y al planeta. Cuyas pruebas los constituyen: la escased de recursos naturales, tales como el petroleo y el carbón; la contaminación de las aguas; la desaparición de especies por superexplotación de los mares etc. Estas pruebas acreditan que, la persistencia y agravamiento de las mismas, y una vez conocidos sus efectos; objetivamente, puede decirse que constituyen un síndrome.
    ¿Quién lo padece?. Es un trastorno de los capitalistas, cuya filosofía recogida en los ordenamientos jurídicos de los países de occidente, tanto de origen sajón como de origen romano, se manifiesta por actitudes y actuaciones que pretenden hacerse ricos, individualmente. Ser más ricos que los demás y conseguirlo en el menor tiempo posible. Lo que implica ser los mayores depredadores de los recursos naturales del planeta, y, para conseguirlo, necesariamente, tienen que hacer una inmensa mayoría de pobres y cada vez más pobres, que, son a los que no les dan empleo y los que trabajan para mantener a ese pequeño número de ricos que cada vez quieren ser más ricos a costa, como digo, de generar más pobres, hambre, miseria y enfermedades.
    Al ser el capitalismo un modelo agotado que ha producido la mayor degradación del planeta en el menor número de años, y, persistir, los capitalistas, en su idea de hacerse cada vez más ricos, individualmente, a sabiendas de que son un perjuicio constante para la Humanidad y para el planeta. Los sitúa como sufridores de un trastorno, cuya enfermedad si no se trata adecuadamente aceptando que el ser iguales, economicamente, para disfrutar de los recursos del planeta, adecuadamente, todos y cada uno de los humanaos, manteniendo el poder de regeneración de los recursos naturales por el planeta, de los que, los trastornados, hoy, disfrutan mayoritariamente, en perjuicio de los demás ciudadanos. No importándoles lo que pueda suceder en el futuro con la Humanidad y con el planeta, pués, su falta de raciocinio y sobra de egoismo y ambición, les produce el síndrome, de tal magnitud que, han conseguido en un periodo de años muy corto someter a la Humanidad y al planeta a los mayores perjuicios que ha sufrido en toda su história. Me viene a la memoria la depresión del año 1929; las crisis sucesivas del petróleo, antes de 1973 y después de 1973. La gran depresión del año 2007 producida por las entidades finacieras etc. Todos estos indicadores  dejan de manifiesto lo que son los síntomas de aquellos que padecen síndrome del capitalismo, y que son, los que tienen el poder fáctico de este planeta. Que ponen y quitan gobiernos a gusto y modo, con el fin de hacerse cada vez más ricos y, cuando, en su ambición producen recesiones, crisis y depresiones económicas, los gobiernos de turno se ponen a su disposición dándoles todo el dinero público que pidan para manter su riqueza, lo cual, genera mayor número de pobres y cada vez más pobres.
     Estos trastornados, tienen unos aliados que les favorecen mantener su filosofía del capitalismo aberrante. Y son las organizaciones no gubernamentales (ONGs), pues, se puede entender facilmente que, para solucionar cualquier problema, lo que hay que conseguir es anular la causa que lo produce, no paliar sus efectos. Pués las ONGs, lo que hacen es proporcionar satisfacer una mínima parte de las necesidades que a los empobrecidos por los ricos les producen éstos. Voy a explicarme con una metáfora: El capitalismo puede compararse con una garrafa de aceite rota que va perdiendo aceite por un pequeño agujero y va manchando por donde pasa. Lo que hacen las ONGs es limpiar el aceite que cae al suelo, o sea, paliar sus los efectos del capitalismo aberrante -garrafa de aceite rota-. En lugar de anular la causa, tapando el gujero por el que pierde aceite la garrafa, para impedir que siga vertiendo aceite -generar más pobres-. O sea, anular la causa para no tener que paliar el efecto. Pues mientras no se anule la causa, el capitalismo aberrante, seguirá generando más número de pobres y más pobres, y, las ONGs seguiran paliando el efecto; con cuya actitud ayudan a que el sídrome del capitalismo siga afectando a más ciudadanos. Y, la filosofía del capitalismo aberrante o sídrome del capitalismo, seguirá trastornando a más ciudadanos con la consiguiente degradación del planeta, al no respetar el equilibrio entre uso y disfrute de los recursos naturales del planeta y la capacidad de regereación del mismo de estos recursos. Lo que está directamente relacionado con el crecimiento demográfico. Cuyo crecimiento le interesa a los capitalistas mantenerlo, para, tener un stock de mano de obra desempleada y conseguir así pagar salarios más bajos.


1 comentario:

centrino dijo...

y el síndrome de estar a la ultima, de pensar que nunca estamos a la altura del progreso, de poder respirar esperando la nueva jugada que van a hacer los de arriba para hacernos la vida miserable en un bucle infinito. ver la historia de las cosas.